Noticia inventada o acto organizado para provocar la cobertura de la prensa, como la apertura de oficinas, una conferencia de prensa para abordar temas baladíes, una ceremonia, una cabalgata, etc. Se trata de obtener publicidad para la persona o causa que organiza el "suceso", por lo que todo se planea para su conveniencia. El éxito o fracaso de muchas acciones políticas depende de la cobertura de prensa, de ahí la necesidad de crear sucesos que llamen su atención.

El término es de Boorstin quien escribió en 1962 (La Imagen, Una Guía a los Pseudosucesos en América), que los "sucesos" fabricados han tomado el lugar de los acontecimientos reales y que son diseñados para manipular y promover más que para informar; que un pseudo-acontecimiento no es un descarrilamiento o un terremoto, sino una conferencia de prensa. Ya Maquiavelo aconsejaba:"un príncipe sabio debe, cuando tenga ocasión, procurarse con astucia alguna enemistad, a fin de que, una vez vencida, resulte mayor su grandeza."

Durante las elecciones, una parte muy importante de las campañas se dedica a buscar la cobertura de la prensa mediante una intensa labor informativa. La prensa hace que los actos de la campaña tengan efectos en los electores que no los presenciaron, pero que se enteran de ellos por los medios masivos. También muchos actos tienen como destinatario exclusivo a los medios de comunicación. Con la cobertura de la prensa, se logran otros propósitos: dar mayor credibilidad a los mensajes de la campaña, ya que al ser transmitidos no como propaganda sino como noticia, son más creíbles para los electores; y además, aprovechar la difusión "gratuita" de los mismos.

En consecuencia, un criterio importante en la programación de los actos de campaña es asegurar que sean cubiertos oportunamente por los medios de comunicación, para este fin se ajustan los horarios, los escenarios, acciones, etc.

De este modo, desde el lanzamiento de la precandidatura, hasta el cierre de la campaña, el resultado de las encuestas, los pronunciamientos del candidato, la adhesión de grupos, la promoción del voto y en general, todo acto de una campaña es potencialmente susceptible de ser planeado para atraer la atención de la prensa. Al efecto, se formula un programa de medios "gratuitos" o de información, diferente del programa de medios pagados o de propaganda. Se trata de convertir en noticia todo acto de la campaña.

En suma, la atención de los medios es un factor crítico para el éxito electoral, por lo que toda campaña trata de maximizar su exposición a los mismos.