Es un elemento de la comunicación no - verbal, la postura de una persona puede usarse o ser tomada para indicar una gama de aspectos de su comportamiento. Por ejemplo, la gente frecuentemente hace juicios sobre otros loa estados de la mente de otros a partir de la postura de su cuerpo y ciertas posturas que parecen comunicar algo de la manera en que una persona se siente.

El optimismo, la confianza y la dominación, por ejemplo, se asocian frecuentemente con una postura erguida, mientras que la depresión tiende a ser asociada con una postura encogida. La postura puede usarse para deducir una variedad de mensajes de retroalimentación y también puede ser utilizada para comunicar nuestra actitud a otros.

Los sentimientos positivos hacia otros se muestran frecuentemente, en parte, por una postura de inclinación hacia delante en la conversación, y por la imitación de la postura del interlocultor (principio del eco). A la inversa, los sentimientos negativos pueden ser indicados haciéndose para atrás o alejándose de los otros.

El status elevado puede señalarse por una postura erguida. Las actitudes agresivas hacia otros pueden ser demostradas por una progresiva y más exagerada exposición del status elevado o por medio de un comportamiento dominante. Los cambios en la postura pueden usarse para marcar etapas en una conversación.

Los candidatos deben tener un manejo adecuado de sus posturas para que sean congruentes y refuercen el mensaje que tratan de transmitir, especialmente cuando se encuentran bajo las cámaras de televisión.