Es una elección en la cual ocurre un realineamiento político que modifica de manera radical las relaciones dentro del sistema de partidos. Esto es, que abre inaugura a largo plazo un cambio en la conducta electoral. Sólo se puede determinar que se ha registrado una elección crítica en retrospectiva, esto es, cuando en un proceso de largo plazo se observa que las relaciones de los partidos cambiaron; ocurre usualmente cuando los efectos del realineamiento pueden ser medidos. El partido mayoritario, durante las elecciones críticas, se consolida o emerge una nueva mayoría de otro partido. Un ejemplo de elección crítica es la norteamericana de 1932, durante la cual los efectos de la depresión estimularon la salida del poder de los republicanos que habían sido el partido dominante y el arribo de los demócratas, cuyos gobiernos se mantuvieron los siguientes veinte años. Otro, más reciente, lo constituyen las elecciones canadienses de 1984, en las que salió derrotado Pierre Elliott Trudeau y que posteriormente, significaron la desaparición práctica de su partido político, el Partido Liberal.

El fenómeno se explica como resultado de un proceso en el cual un partido mayoritario logra una coalición de votantes cuyo apoyo regular lo mantiene en el poder de modo relativamente estable, pero que el paso del tiempo y el arribo de nuevas generaciones de votantes hacen que las cuestiones políticas en que se fundamentaba esa coalición pasen a segundo término y surjan otras nuevas a partir de las cuales tiene lugar el realineamiento.