Se refiere a la cobertura de las actividades de un candidato como eventos noticiosos por parte de los medios de comunicación. Esta cobertura gratuita constituye una manera poderosa y económica de transmitir información sobre el candidato hacia el público y es más eficaz que la propaganda porque el público le otorga más atención y credibilidad a las noticias que a los spots pagados. Se trata aprovechar la credibilidad que poseen los medios para difundir y apoyar el mensaje de la campaña.

Las campañas buscan comunicar a través de la cobertura de las noticias el mismo mensaje de campaña, como parte del esfuerzo de contacto con los votantes. Al efecto envían, regularmente boletines y comunicados de prensa a los periódicos, a la radio y estaciones de televisión; y convocan a conferencias de prensa cuando el candidato tiene información que a los medios les interesaría cubrir. La agenda del candidato es frecuentemente diseñada para aumentar las expectativas de obtener esta cobertura noticiosa.

La mayoría de campañas tienen órganos de prensa o personal especializado en los medios de comunicación cuya labor primaria es asegurar al candidato una buena cobertura de prensa. Su propósito esencial es confinar el contenido de las noticias reportadas a material e información que resulten benéficos para el candidato, por lo que no es raro que distorsionen en forma deliberada la información con este fin, bloqueen las preguntas, encauzan la atención de los periodistas hacia un tema y los desvían de otros, intenten hacerlos dependientes de la campaña, etc.

Las campañas necesitan de la cobertura noticiosa "gratuita" como un complemento de la propaganda pagada. El resultado es que los medios de comunicación juegan un papel activo en la determinación de los resultados electorales, pues amplían o disminuyen a su criterio y conveniencia, las posibilidades de triunfo de determinado candidato.
En una campaña electoral, el candidato es el medio principal de comunicación del mensaje que trata de persuadir a los electores para que voten por él. En consecuencia, como lo señaló Mc Luhan, sus atributos (físicos, profesionales, capacidades, etc.) juegan un papel importante en cómo se percibe e interpreta el mensaje de la campaña por parte del electorado, y en la época actual de personalización de la política y de uso intenso de la televisión, podría decirse que él mismo es el mensaje.